Con el objetivo es implementar de manera coordinada una serie de medidas de atención inmediata para las personas migrantes y con necesidades de protección internacional, particularmente aquellas provenientes de Venezuela, el gobierno de México creo un grupo de acción.

De acuerdo con un comunicado de la cancillería mexicana, este grupo está conformado por la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), el Fondo de las Naciones Unidas para las Infancias (UNICEF) y el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR). El pasado 13 de octubre Estados Unidos ofreció recibir 24 mil migrantes venezolanos y pactó devolver a México a quienes se salten el proceso.

El plan de respuesta humanitaria consiste, en primera instancia, en una serie de entregas de insumos para el fortalecimiento de las capacidades e infraestructura de la red de albergues en México.

En esta fase, que ya está en implementación, se entrega apoyo para compra de alimentos para albergues; respaldo para hospedaje; kits de higiene; apoyo psicosocial para niñas, niños y adolescentes; mejoras en la infraestructura de albergues, por ejemplo, en materia de agua y saneamiento, así como insumos necesarios para la adecuada estancia de personas migrantes y refugiadas, entre otros.

Asimismo, el plan contempla el acompañamiento de los organismos internacionales para los nuevos albergues que las autoridades locales y estatales han comenzado a implementar para recibir los flujos de personas migrantes y refugiadas, particularmente de Venezuela.