El Gobierno británico afirma que la seguridad en el país latinoamericano “puede suponer un riesgo para los extranjeros” y pide mantener especial cuidado ante la presencia de los grupos criminales.
La violencia de los grupos criminales en México vuelve a acechar al turismo. El Gobierno de Reino Unido ha emitido una alerta de viaje a 10 territorios del país latinoamericano en la que pide a los extranjeros británicos tener especial cuidado con la presencia de las organizaciones delictivas: “Si bien los turistas no han sido el objetivo, cualquier persona en las proximidades de un incidente podría verse afectada”. El Ejecutivo británico recomienda además seguir los consejos de las autoridades mexicanas ante otros imprevistos, como los posibles efectos catastróficos de la temporada de huracanes, de junio a noviembre.
La oficina de Asuntos Exteriores, de la Commonwealth y de Desarrollo (FCDO, en sus siglas en inglés) desaconseja viajar especialmente a 10 Estados: Chihuahua, Sinaloa, Zacatecas, Tamaulipas, Colima, Guerrero, Michoacán, Guanajuato, Jalisco y Baja California. Apunta a los territorios, pero hace excepciones en ellos, como algunas capitales o las zonas aeroportuarias. La oficina británica reconoce los esfuerzos del Gobierno mexicano por proteger los principales destinos turísticos, pero recuerda que, desde inicios de 2021, “han habido varios enfrentamientos entre bandas criminales rivales en destinos turísticos populares de Cancún y sus alrededores”.
Los últimos meses en México no han ayudado a transmitir la tranquilidad sobre el turismo. El asesinato de al menos ocho personas en Cancún y Acapulco al inicio de la Semana Santa (en abril de este año) obligó a que el Ejecutivo liderado por Andrés Manuel López Obrador desplegara más de 8.000 soldados en los principales destinos vacacionales del país. Las imágenes de las playas impolutas y las aguas azules quedaron contrastadas por las de los uniformes de los militares. Se movilizaron por diferentes partes del país: 4.724 agentes fueron repartidos entre las dos ciudades y Tulum, Puerto Vallarta, Mazatlán y las costas de Veracruz; y otros 3.800 estuvieron a cargo de proteger las carreteras del país.
La presencia del crimen organizado también ha sido una constante preocupación para Estados Unidos. El vecino al norte de la frontera cuenta con una serie de avisos de viaje, que mantiene de forma constante y en la que varios territorios permanecen bajo la clasificación de “No viajar a”: Colima, Guerrero, Michoacán, Sinaloa, Tamaulipas y Zacatecas. El Departamento de Estado asocia sus recomendaciones hacia estos territorios a dos tipos de delitos: el crimen y los secuestros. Estados Unidos también recomienda “reconsiderar” los viajes a Baja California, Chihuahua, Durango, Guanajuato, Jalisco, Morelos y Sonora, con lo que amplía el listado británico.
El turismo es una de las principales fuentes de riqueza para un país como México, lleno de destinos para todos los gustos, pero la violencia está lastrando esa posibilidad. Las imágenes de los uniformados en las playas provocan temor entre los posibles viajeros, más allá de las alertas que emiten los países. Las noticias que se dan cada día en los medios de comunicación no incitan a unas vacaciones tranquilas.