¡Majestuoso! Es como podemos describir el trabajo por la misión Solar Orbiter. Las imágenes captadas durante su acercamiento en el mes de marzo nos dejan ver a nuestra estrella a través de esta sonda.

La perspectiva que se nos regaló el pasado 26 de marzo la nave espacial lanzada por la ESA y la NASA en febrero de 2020, nos dio una nueva perspectiva del señor sol.

Proyecto de la sonda Solar Orbiter
Mas allá de las asombrosas postales, el objetivo del proyecto es investigar el astro para ayudar a comprender la heliosfera por medio del estudio de fenómenos como el viento solar y el comportamiento magnético de la misma.

El detalle y precisión de las imágenes se obtuvieron gracias a que la nave tuvo una aproximación equivalente a un tercio de distancia de la que separa la tierra y al sol. En este punto (conocido como perihelio), la sonda se encontraba dentro de la órbita de Mercurio, y la temperatura en este lugar alcanzó alrededor de 500 grados centígrados.

Además de imágenes, se obtuvo un video donde se pueden ver las erupciones y las vistas de los polos. Todo esto ocurrió durante la primera aproximación de la sonda a la estrella luminosa.

Imagen del Sol captada por la sonda Solar Orbiter.ESA

‘El erizo’.

Esta figura  captada desde el perihelio, se extiende 25.000 kilómetros a través del Sol; se pueden observar también multitud de picos de gas caliente y frío que se propagan a todas direcciones.

Además, también se captaron varias erupciones solares y una eyección de masa coronal con dirección a la Tierra, lo que dio una previsión meteorológica en tiempo real.

El erizo', imagen captada por Solar Orbiter.ESA

Observación y estudio

La tarea de observación e investigación no es nada sencilla, ya que las imágenes captadas por la sonda Solar deben ser analizadas para detectar características y acontecimientos que no pueden ser descubiertas en el momento. Esta actividad debe ser comparada con momentos anteriores para ver si existen coincidencias.

La sonda Solar Orbiter nos ha regalado a todo el mundo increíbles momentos que nos dejan boquiabiertos. Basta con mirar las postales del pasado 26 de marzo para relajarnos un poco y disfrutar de la inmensidad de nuestro astro.