La totalidad de operadores del Metro son sometidos, previo a su jornada laboral, a una prueba de alcoholímetro, luego de que un conductor fue exhibido en estado de ebriedad en un tren de la Línea 2.

En un recorrido de Zapata a Atlalilco de la Línea 12, el director general del organismo, Guillermo Calderón señaló que estas acciones también se realizan de forma aleatoria durante el turno y salida de los conductores, además de que se practican pruebas visuales y sensoriales.

“Y lo que hemos hecho y haremos previa prueba de alcoholemia al 100% de los operadores al ingresar a su turno, prueba de alcoholemia aleatoria en el intervalo de su turno y prueba de alcoholemia aleatoria a la salida de su turno, de tal forma que quede claro que no permitiremos ningún operador que haya ingerido alcohol, estaremos muy atentos y tienen filtros también de control visual sensorial”, indicó.

El director del Metro reconoció que si bien el número de pruebas de alcoholemia se redujo durante la pandemia, es una actividad permanente y el año pasado se aplicaron más de 36 mil test de este tipo.