El presidente Andrés Manuel López Obrador ha promovido el programa ‘Sembrando Vida’ para detener la migración de ciudadanos guatemaltecos, hondureños y salvadoreños, a los Estados Unidos. En la frontera Sur muchos migrantes trabajan en este programa.

“Me enteré que ayudan a los inmigrantes con Bienestar Social del gobierno, es una entrada de dinero, ya algo para alquiler y algo por lo menos para las tortillas, para la comida”, dijo Cristian Hernández, migrantes de Honduras

“La verdad es que nunca había trabajado en campo en Honduras, mi trabajo era mecánica pesada y cuando entré aquí a México dormía en la calle”, refirió Daniel López, migrante de Honduras.

“Ya llevo cuatro meses de estar acá. Imagínese si no tuviéramos esta ayuda, estuviéramos pasándola mal”, reiteró. Francisco Avilés, migrante de Nicaragua.

Decenas de migrantes centroamericanos trabajan en la rehabilitación de 70 hectáreas de cacao y 150 hectáreas de mango, en la Finca Frida, propiedad de la Secretaría de Bienestar, en Tapachula, Chiapas.

“Nos ayudan en la limpieza del área, la cosecha, el secado, la selección de granos, también nos ayudan a propagar semillas de cacao y plantas forestales para la sombra del cacao”, explicó Saydi Pérez García, coordinadora de la zona económica, Tapachula.

De marzo del 2019 a la fecha, la Secretaría de Bienestar ha empleado a 17 mil migrantes, que han solicitado refugio, en el Programa de Desarrollo Integral y Sembrando Vida, con el fin de frenar el flujo hacia los Estados Unidos trabajan de 3 a 4 meses y perciben 170 pesos diarios.

“Con lo que me paga me sirve para mi casa, ayuda a mi familia en Haití”, dijo Jerome Wilquins, migrante de Haití.

El programa también pretende detener la migración de chiapanecos a la frontera norte. En el vivero forestal militar habilitado en junio de 2019 trabajan unas 200 personas, la mayoría pobladores de la región. Ahí se han producido 12 millones de plantas de árboles maderables y frutales.

“Acabo de llegar de Tijuana, estuve dos años y medio allá. Una compañera que trabaja acá, me notificó qué estaban contratando y vine a dejar mis papeles”, refirió Mairany Herrera, habitante de Tapachula.

Sin embargo, productores de la región denuncian que el programa Sembrado Vidas está generando deforestación.

“Aquí estamos en una parcela del ejido Guadalupe, aquí desafortunadamente el programa los obliga a tirar los árboles. Como vemos, los troncos de los árboles, árboles que tenían 20, 30, 80, 100 años, fueron derribados y para sembrar nuevos. Que de aquí a que crezcan nos va a llevar otros 10, 20, 30, 40 años”, agregó Ismael Gómez, de la Confederación de Cooperativas Unidos para Estar Bien.

“La mayoría de las denuncias se confunden manejo agrícola, con manejo de selva. Esto no son selvas, no son tampoco áreas nacionales protegidas, no hay restricciones, son zonas agrícolas que se están reconvirtiendo. No se está quemando y además tenemos por norma la restricción de la quema”, concluyó Jorge Aguilar Reyna, coordinador de Sembrando Vida, Tapachula, Sierra, Soconusco.