En la Sierra Gorda de Querétaro, los municipios de Arroyo Seco y Landa de Matamoros fueron seleccionados para aplicar 13 mil 580 vacunas contra COVID-19 a adultos mayores.
Muy temprano don Jorge y doña Carmen se alistaron para salir rumbo al centro de salud de la comunidad de Santiago Mexquititlán, perteneciente al municipio de Amealco, en la sierra de Querétaro, la pareja decidió no desayunar para que la vacuna les hiciera efecto.
“Me decía mi esposa: vamos a desayunar; pero no, mejor no, vamos a tomar café, un té es lo que va a circular primero, quiero que sigamos en ayuno porque la inyección nos va a circular en todo el cuerpo”, comentó Jorge Domingo Pedro Bonifacio, vecino Santiago Mexquititlán.
Doña Carmen ya estaba lista con su traje tradicional otomí y espero a que don Jorge saliera de casa, para caminar dos kilómetros hasta el módulo de vacunación.
“Uno de mis hijos llegó y nos preguntó si ya nos habíamos ido a vacunar. Le dijimos que no, y de inmediato dijo: vayan, vayan, no quiero que se queden sin vacunar”, dijo Carmen Dominguez, vecina de Santiago Mexquititlán Querétaro.
Los recibieron con gel antibacterial, después se registraron y esperaron durante una hora para recibir la vacuna y esperar que no hubiera efectos adversos, doña Carmen asegura que nunca sintió temor.
“No tengo miedo, ya me he vacunado, como tengo mis nietas en la escuela siempre voy a las juntas, cuando llegan las enfermeras ya nos vacunan“, agregó doña Carmen.
En el municipio de Amealco, Querétaro, se recibieron 7 mil 540 dosis contra el COVID-19 y los encargados de la vacunación estaban sorprendidos de la respuesta de los adultos mayores, aunque a la mayoría los tuvieron que invitar casa por casa.
“Nos comunicaron que en San Miguel Tlaxcaltepec llegó un adulto de 96 años a vacunarse y eso nos habla de la responsabilidad de los adultos mayores”, concluyó Óscar López Galván, Director Regional del Programa bienestar Querétaro.