Durante un recorrido por diferentes hospitales de la ciudad, se pudo ver cómo sigue llegando gente enferma en los tres turnos. Son en su mayoría pacientes con problemas respiratorios.

“Me siento frustrada porque por más que ayudes a la gente que llega con COVID, de nada sirve porque siguen saliendo a las calles. Es frustrante porque tu trabajo no sirve, con pacientes COVID estamos 6, 7 horas”, dijo la enfermera Lucero.

“Mi hija trabaja aquí como enfermera, ella se está jugando la vida a día por la gente irresponsable”, enfatizó María, madre de enfermera.

Tony, una joven enfermera del Hospital General de Tlatelolco del IMSS, asegura que nunca había sentido tanto estrés.

“De repente ves a los pacientes y los ves entre comillas ‘bien’ y ya, ya se murió eso es muy impactante. Estamos peor que como empezamos, llega el momento en que tu cuerpo ya no te da”, insistió la enfermera Tony.

La mayoría del personal de Salud que atiende a pacientes con COVID labora un promedio de ocho horas, aunque algunos se ven obligados a extender sus turnos de trabajo y al terminar, no pueden evitar sentir tristeza.

“¿Qué es lo más duro qué te ha tocado ver? La muerte de un doctor. Un doctor fue mi paciente, por estar luchando contra esta pandemia lamentablemente falleció”, dijo la enfermera Dulce.

También los paramédicos aseguran encontrarse agotados moralmente.

“Antes era súper fácil encontrar un hospital, ahora ya es muchísima suerte. A veces son 9-10 horas con un paciente arriba de la ambulancia, todo lo que vemos, despedidas, muerte, ya es un desgaste físico para todos”, concluyó el paramédico Gustavo.