Una niña de cuatro años de edad fue rescatada con vida este martes después de pasar casi cuatro días bajo los escombros en la ciudad costera de Esmirna (Turquía), la más afectada por el terremoto de magnitud 6,8 que se registró el pasado viernes frente a la costa Egea.

La niña, Ayla Gezgin, estaba sentada en la cocina de un edificio derruido cuando llegaron los equipos de rescate, en un hueco que había quedado intacto entre la encimera y la lavadora, según contó uno de los profesionales que la atendieron a la cadena de televisión NTV.

“Escuchamos una voz, preguntamos quién había y respondió: ‘Soy Ayla, estoy bien’. Le dijimos ‘Espera que te sacamos’, y avanzamos hacia donde estaba”, relató uno de los trabajadores que la sacaron de los escombros.

Según el hombre, la niña estaba consciente y sin daño aparente: “No le había pasado nada, estaba sentada y esperando”.

Se cree que la madre de la niña, Fidan Gezgin, sigue aún bajo los escombros, mientras que su padre, Ugur, ex árbitro de fútbol, se salvó y ya está con ella.

Desde el viernes pasado, la cifra de muertos en el siniestro alcanza ya las 102 personas en Esmirna, la única provincia turca que ha registrado fallecidos, a los que se añaden dos en la isla griega de Samos.

Además, un millar de personas han resultado heridas y 107 han sido rescatadas con vida de entre los escombros.