Natalia Agusti es la encargada del Centro de Enfermedades Respiratorias en un hospital particular al poniente de la Ciudad de México. A finales de febrero contrajo la enfermedad de uno de sus pacientes en su consultorio.

Ya venía de un lugar, de Washington, que ya había tenido toda la sintomatología y llegó a México y decidió sólo aislarse en casa y no fue a tomarse pruebas ni nada. Empecé con sintomatología a los dos días de haber estado con mi paciente”, dijo Natalia.

Tras superar la enfermedad, regresó al hospital. Considera que ahora tiene menos posibilidades de contraerla que otros profesionales de la Salud que aun no se contagian.

A mi me interesa de verdad poder ayudar a que no se expongan mis colegas que no han estado expuestos. Poder ayudar a más gente y poder ayudar en un futuro a diagnosticar esto más rápido”, reiteró.

De 8 de la mañana a 8 de la noche permanece en el Triage de este hospital. Es la zona donde se realizan pruebas y además se evalúa y clasifica a quienes presentan síntomas relacionados con el COVID. En casos graves aquí se estabiliza a los pacientes.

El Triage que hacemos son unas preguntas. Sobre esas preguntas decidimos si tiene falla respiratoria, cómo están sus signos vitales. Sobre eso decidimos si es un paciente que está estable y puede ir a casa en lo que tenemos su resultado. Esta última área es nuestra área crítica, en este caso los graves aquí se recibían cuándo venían muy graves, ya sea para intubación o algún manejo crítico, de algún manejo crítico”, afirmó Natalia.

Natalia dice estar dispuesta a colaborar en el Centro Banamex, que desde la semana pasada funciona como hospital ambulatorio.

No voy a dejar el área donde estoy que es en las mañanas. Pero si hubiera la oportunidad y me llaman a turno nocturno. Todo el mundo me dice ¿y a qué hora vas a dormir? A lo mejor en dos o tres meses todo se calmará y tendremos un chance de descansar en casa”, concluyó Natalia Agusti, del Centro de Enfermedades Respiratorias Hospital Particular CDMX.