Ciudad de México.- La Fiscalía General de la República (FGR) autorizó archivar la investigación sobre las presuntas torturas a Mario Aburto, al no hallar elementos para proceder contra distintos servidores públicos, incluidos Manlio Fabio Beltrones y el expresidente Carlos Salinas de Gortari.
La Fiscalía del caso Colosio informó el pasado viernes a Paloma Xiomara González, juez segundo de Distrito en Amparo de la Ciudad de México, de su decisión de aprobar el no ejercicio de la acción penal en dicha averiguación previa.
La determinación fue dada a conocer este lunes, en un acuerdo publicado en la lista de acuerdos del juzgado, luego de que la semana pasada González le diera un plazo de 3 días a la FGR para informarle si había autorizado la propuesta de darle “carpetazo” al caso.
Desde el pasado 21 de noviembre, la Fiscalía responsable del caso propuso archivar la indagatoria 2080/94 por carecer de evidencias de tortura, pero Aburto presentó un recurso de inconformidad para tratar de revertir dicha determinación.
La consulta del no ejercicio de la acción penal fue turnada a un funcionario de mayor jerarquía que el fiscal del caso Colosio, que al final autorizó el “carpetazo”.
A pesar de la determinación, este asunto aún no está concluido porque el magnicida, quien es representado por el Instituto Federal de la Defensoría Pública, tiene la posibilidad de presentar un amparo para tratar de revertir el archivo de la indagatoria.
Entre los argumentos para desestimar la tortura, la FGR consideró que el Protocolo de Estambul practicado al asesino el 30 de septiembre de 2021, si bien concluye que fue víctima de malos tratos, es deficiente en su metodología.
La investigación por tortura tiene su origen en una queja de Aburto ante la CNDH en la que acusó a agentes de la entonces PGR de haberlo vejado, junto con el entonces gobernador de Sonora, Manlio Fabio Beltrones, por órdenes del presidente Carlos Salinas de Gortari.
La queja dio lugar a que en septiembre de 2021, la CNDH emitiera una recomendación a la FGR para investigar las supuestas torturas.
Como consecuencia, en julio de 2022 la Fiscalía empezó a llevar a cabo diligencias en la misma averiguación previa abierta en 1994 por el magnicidio.