Ciudad de México.- Los migrantes y las empresas se enfrentan a barreras administrativas como la carencia de documentos que acrediten la estancia regular en México.

El sector privado tiene la intención de emplear a los migrantes que llegan a México, sobre todo en las ciudades fronterizas, pero en la práctica, varias barreras impiden integrarlos al trabajo formal.

Una investigación del Colegio de la Frontera Norte señala que la inserción de migrantes extranjeros en el mercado laboral se concentra principalmente en empleos informales, en tareas poco calificadas en establecimientos comerciales, mercados, restaurantes, gasolineras, agencias de seguridad y en la industria de la construcción, entre otras actividades.

En cuanto a los empleos formales, la industria maquiladora es su principal fuente de reclutamiento.

No obstante, los migrantes y las empresas se enfrentan a barreras administrativas como la carencia de documentos que acrediten la estancia regular en México, así como de la Clave Única de Registro de Población (CURP), el Registro Federal de Contribuyentes (RFC) y el Número de Seguro Social (NSS).

Aunado a esto, las dependencias gubernamentales que los expiden no reconocen los documentos de estancia regular en México expedidos por el Instituto Nacional de Migración (INM) como comprobantes de identidad, señaló María Inés Barrios, coordinadora de la Especialidad en Estudios de Migración Internacional de El Colegio de la Frontera Norte.

“Esta ha sido una de las limitantes para el sector privado, sobre todo para aquellas empresas multinacionales que están en el País o tienen establecidos procesos de contratación que están regulados bajo estas normas internacionales, les es muy difícil poder incorporarlos de manera formal”, subrayó.

La bancarización se ha convertido en otro de los obstáculos de la inserción laboral, ya que para los empleos formales es indispensable contar con una cuenta bancaria en México para el depósito del salario.

La Organización Internacional del Trabajo (OIT), que cuenta con un grupo dedicado a la integración laboral de los migrantes en Tapachula, Chiapas, reconoció que es difícil emplearlos.

“De qué vale tener una persona migrante sin reconocer sus competencias laborales.

“Eso supone una coordinación de las instancias de competencia como el Conocer, el Conalep y otras instancias para que las empresas reconozcan esas competencias y generen salarios acorde a ellas”, comentó Pedro Américo Furtado, director general de la OIT en México.

Pese a los obstáculos, hay iniciativas de contratación en empresas que se ubican en las ciudades fronterizas.

Por ejemplo, en los OXXO han contratado a unas mil 500 personas que tienen el estatus de refugiados y migrantes, señaló Barrios.

Los call centers se ha consolidado como un nicho especializado y en expansión, sobre todo en Tijuana, según el reporte del Colegio.

También hay una empresa manufacturera en Tijuana que generó un programa para contratar migrantes; mientras que en Ciudad Juárez, una compañía de manufactura automotriz emplea personas en situación de movilidad en la instalación de líneas de producción.

El Consejo Coordinador Empresarial (CCE), ONU y la organización Agenda Migrante instalaron un grupo de trabajo para la elaboración de un modelo migrante seguro y productivo.

La idea es detectar ofertas laborales para migrantes, capacitarlos y vincularlos a las empresas, además de trabajar en la expedición ágil de la documentación necesaria.