En el mes de agosto de este año, el capitán José Martínez Crespo solicitó su libertad bajo caución dentro de uno de los procesos penales que se siguen en su contra por el caso de Ayotzinapa.

De acuerdo con registros judiciales, el 29 de agosto el mando militar interpuso un juicio de amparo en el que solicitó, además de la suspensión contra la orden de aprehensión, su libertad bajo caución.

Un día después, una juez federal le concedió la suspensión provisional para el efecto de que el quejoso quedará a disposición del órgano jurisdiccional, en cuanto a su libertad personal se refiere, en el lugar en que actualmente se encuentra recluido.

Sin embargo, la impartidora de justicia rechazó la petición de otorgar la libertad bajo caución, al argumentar que la “legislación vigente que rige el juicio de control de la constitucionalidad, no prevé la posibilidad de solicitar al juez de distrito libertad, pues sólo este juzgado está facultado para imponer montos como requisito de efectividad para que siga surtiendo efectos la suspensión del acto”.

Días después, el 6 de septiembre la juzgadora dio a conocer que recibió un escrito en el que Martínez Crespo externaba su decisión de desistirse de la suspensión provisional que le habían otorgado; escrito que fue ratificado el 12 de septiembre.

Por este motivo, el 13 de septiembre la juez de amparo dejó sin efecto la medida cautelar; al día siguiente, la Fiscalía General de la República cumplimentó la segunda orden de aprehensión contra el mando militar por los delitos de delincuencia organizada y desaparición forzada de personas relacionados con el caso Iguala.

El capitán Martínez Crespo fue detenido en noviembre de 2020 por los delitos de delincuencia organizada, homicidio y desaparición vinculados con la desaparición de los 43 estudiantes normalistas; desde entonces permanece en la prisión del Campo Militar 1-A. Será el 28 de octubre de este año cuando la juez de distrito resuelva si le concede el amparo al mando militar.