A cuatro días del sismo de magnitud 7.1, con epicentro en Acapulco, Guerrero, continúa el recuento de afectaciones en viviendas. Es en las comunidades rurales más alejadas del puerto donde la ayuda aún no ha llegado.
“No nos queremos ni arrimar porque ya está por caerse, por colapsar y ya hay veces vengo de ratito para ver que si puedo sacar unas cositas lo que esté bueno pues y ya pues se perdió todo”, Alejandro Olea González, damnificado.
En segundos la casa de Alejandro Olea de 34 años de edad, quedó reducida a un montón de tierra y madera, es uno de los cientos de habitantes de la zona rural de Pueblo Madero, “El Playón”, ubicado a unos 35 kilómetros de Acapulco y uno de los lugares más cercanos al epicentro del sismo del pasado martes de magnitud 7.1.
“Esperemos que nos ayuden nomás porque no tenemos ni donde estar, para meter a mi familia la verdad qué más puedo decir ya no tengo ni palabras, quedamos sin nada”, Alejandro Olea González, damnificado.
“Estábamos viendo televisión y nomás de repente se oyó un tronidazo para acá este lado y empezó a temblar fuerte y salimos como podíamos”, Lamberto González Hernández, damnificado.
Desde la noche del martes los mil habitantes de esta comunidad están sin energía eléctrica porque grandes rocas derribaron cableado y 16 postes de energía.
“Toda esta parte de aquí está este tirado completamente ya inservible que ya, para acá esté lado ya no se puede vivir, la casa es de mi mamá y ya la casa no se puede vivir aquí”, Feliciano Rico, damnificado.
Según las autoridades de la comunidad son más de 500 casas afectadas, 50 de ellas pérdida total.
“Estamos entendidos que aquí fue el epicentro y tenemos muchos daños de viviendas afectadas por el sismo este por lo que hemos recorrido tal vez sean como 500 viviendas y falta por recorrer”, Guillermo Álvarez Nava, Comisario de Pueblo Madero El Playón.
Ante la cantidad de daños los damnificados bloquearon la carretera federal México – Acapulco para exigir el apoyo de las autoridades.
“Queremos que las tres instancias de gobierno nos hagan caso tanto municipal estatal y federal, porque nos han atendido cómo debe ser”, Natalio Bello González, damnificado.