Los diputados rusos aprobaron este miércoles 24 de marzo, una ley que otorga a Vladimir Putin, el derecho a postularse a dos nuevos mandatos presidenciales, lo que facilita el camino para su posible residencia en el Kremlin hasta 2036.

Esta ley fue concebida para poner “la legislación electoral en conformidad con las nuevas normas de la Constitución“, de acuerdo al sitio web de la cámara alta del Parlamento, consecuencia del referéndum constitucional del verano de 2020.

Una enmienda controvertida facilita que el presidente, de 68 años, se mantenga en el poder, pese a que teóricamente debería renunciar al final de su actual mandato, en 2024.

El límite de dos mandatos consecutivos existirá siempre, pero “esta restricción no se aplica a quienes hayan ocupado el cargo de jefe de Estado antes de la entrada en vigencia de las enmiendas a la Constitución”, señala el texto votado por los legisladores, por lo que Putin puso su contador en cero nuevamente.

Tras llegar al poder en el año 2000, Putin se retiró al finalizar su segundo mandato, en 2008, con lo que instaló en el Kremlin a su primer ministro, Dmitri Medvédev. Luego de un intermedio de cuatro años, Putin fue reelegido presidente en 2012.

La revisión votada en el veran,o introduce también en la Constitución principios conservadores deseados por el presidente (la fe en Dios, matrimonio reservado a los heterosexuales, educación patriótica), y también garantías sociales, como la indexación de las jubilaciones.

Retrasada una semana por la pandemia de COVID-19, la votación, cuyo resultado no despertaba la menor duda, finalizó oficialmente con la victoria en un 77.92% de los votos y una participación del 65% de los diputados, esto de acuerdo a cifras oficiales.

El opositor, Alexéi Navalni, calificó esta consulta de “gran mentira” y la oenegé Golos, especializada en el monitoreo de elecciones, la denunció como un atentado “sin precedentes” a la soberanía del pueblo ruso.