El dólar cayó a un mínimo de dos semanas contra una canasta de monedas y a un piso de siete meses frente al yen, ya que un alza de los mercados bursátiles redujo la demanda por la seguridad del billete verde y después de que la Reserva Federal (Fed) mantuvo intacta su laxa política monetaria.

Las acciones escalaron ante las apuestas de que republicanos mantendrán el control del Senado de Estados Unidos, lo que reducía temores sobre importantes cambios políticos que podrían dañar al sector corporativo bajo una posible presidencia de Joe Biden, pese a que la elección aún no está resuelta.

El demócrata Joe Biden se acercaba a la victoria en la carrera presidencial sobre Donald Trump en unas elecciones extremadamente cerradas, mientras el republicano lanzó una serie de demandas con la esperanza de frenar a su oponente.

Pero se veía improbable que se diera la denominada “ola azul” donde los demócratas también ganarían el control del Senado en las elecciones legislativas.

“Creo que el mercado asume que Biden gana la Casa Blanca, pero que el Senado no estará en manos de los demócratas, por lo que no hay un estímulo (fiscal) tan grande”, dijo Marc Chandler, estratega jefe de mercado de Bannockburn Global Forex, en Nueva York.

El índice dólar bajó un 0.95% frente a una canasta de monedas a 92.51 unidades.

El euro escaló un 0.99% a 1.1838 dólares, mientras que la divisa estadounidense cayó un 0.95% frente al yen a 103.49 yenes, el nivel más bajo desde el 12 de marzo.

El dólar ha sido golpeado por la política de tasas de interés cercanas a cero por parte de la Fed y la compra de bonos a medida que el banco central apunta a estimular el crecimiento de la economía, que fue arrasada por el cierre de los negocios debido a COVID-19.

El banco central se comprometió el jueves nuevamente a hacer lo que sea necesario en los próximos meses para sostener la recuperación económica. Algunos analistas dijeron que la Fed podrían necesitar tomar mayores medidas para impulsar a la economía si no hay otro gran paquete de estímulo fiscal, aunque otros apuntaron a que se estaría quedando sin herramientas.