China informó el miércoles de más de 100 nuevos casos de COVID-19 mientras el país continúa combatiendo un brote en Xinjiang.

Los 101 casos nuevos fue el incremento diario más alto en semanas en China. De la cifra, 89 correspondieron a la región noroccidental de Xinjiang; ocho a la provincia nororiental de Liaoning y uno a Beijing. Otros tres casos fueron importados debido al regreso de ciudadanos chinos.

En las afueras de Xinjiang, el virus fue casi contenido en el territorio continental de China, donde la cifra de fallecimientos por COVID-19 se mantenía en 4,634 entre 84,060 casos registrados desde la aparición de la pandemia por primera vez en la ciudad central de Wuhan a finales del año pasado.

Los hospitales están atendiendo a 482 personas debido a la enfermedad, y 274 más se encuentran en aislamiento mientras son vigiladas por acusar síntomas de la infección o porque dieron positivo al virus sin mostrar problemas.

El brote en Xinjiang se ha centrado en la capital de la región y la ciudad más grande, Urumqi, donde las autoridades han aislado a algunas comunidades, restringido el transporte público y ordenado pruebas generalizadas.

En Corea del Sur se registraron 48 casos adicionales y se mantiene la tendencia ascendente de los contagios.

Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Corea dijo el miércoles que las cifras adicionales elevan el total en el país a 14,251 con 300 fallecimientos.

Catorce de los nuevos pacientes se infectaron localmente y el resto provino del exterior. Corea del Sur registra entre 20 y 60 casos nuevos a diario desde que flexibilizó sus medidas de distanciamiento social a principios de mayo.