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Pasa de 326 mil 571 toneladas en 2018 a 638 mil 755 ton en 2021, según datos de la petrolera.

Contrario a los compromisos de reducción de emisiones de México, Pemex incrementó su envío de metano a la atmósfera en 95.5 por ciento de 2018 al 2021.

La subsidiaria Pemex Exploración y Producción (PEP), encargada de realizar actividades de exploración y extracción de hidrocarburos, reportó en 2018 emisiones de metano por 326 mil 571 toneladas.

Para 2021, último dato disponible, las emisiones aumentaron a 638 mil 755 toneladas, según datos de la petrolera obtenidos a través de una solicitud de información.

En la solicitud se pidió también el dato de 2022, pero no fue entregado.

Sin embargo, se estima que los envíos de metano del año pasado sean mayores a los de 2021 por el incremento de la actividad en los campos Ixachi y Qesqui, de los que se han documentado elevadas quemas de gas.

Ante la Conferencia sobre Cambio Climático COP 27, de noviembre del año pasado en Egipto, el gobierno mexicano hizo compromisos para reducir sus emisiones de contaminantes y, en octubre de 2023, el presidente Andrés Manuel López Obrador notificó al enviado presidencial para el clima de EU, John Kerry, que Pemex reduciría en 98 por ciento sus emisiones de metano para 2024.

Viviana Patiño, investigadora del programa de regulación y competencia de la organización México Evalúa, explicó que la falta de resultados de Pemex tiene consecuencias en los mexicanos.

“Las reacciones a la salud son muy variables porque dependen de la cantidad de metano que se esté inhalando, pero definitivamente hay afectaciones a la salud como enfermedades respiratorias o cardiovasculares.

“Pero la falta de claridad en los reportes y la calidad de información es algo que venimos trabajando desde hace mucho tiempo con estas empresas (…) no me parece que haya esta convicción por parte de las empresas del Estado de dar información a los mexicanos”, apuntó.

La empresa tampoco ha sido sancionada o multada por la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA), según reporta la propia Pemex.

Nora Cabrera, directora de la asociación Nuestro Futuro, advirtió que el metano, al ser quemado, emite carbono negro, y es parte de las partículas PM2.5, que pueden llegar más profundo a las vías respiratorias, lo que da como resultado complicaciones de cuadros de asma, ardor en los ojos, irritación de las vías respiratorias y disfunciones pulmonares, vinculadas incluso a casos de muerte.