La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo dejó claro que no habrá impuesto a los videojuegos, ante la dificultad de clasificar si su contenido es o no violento.
Durante su conferencia matutina, la mandataria explicó que no existen criterios claros para determinar qué tipo de videojuegos podrían considerarse violentos y, por tanto, sujetos a un gravamen.
“Es muy difícil distinguir entre un videojuego que tiene violencia y uno que no. Entonces, ¿cómo le vas a poner un impuesto? ¿Quién va a determinar esa circunstancia?”, cuestionó.
🗳️📌 SHEINBAUM RECULA CON EL IMPUESTO A VIDEOJUEGOS🎮: NO SABEN COMO COBRARLO
— Juan Ortiz 🗳️👁🗨 (@Juan_OrtizMX) December 23, 2025
Claudia Sheinbaum anunció que no se cobrará el impuesto del 8% a los videojuegos considerados “violentos”.
La razón es por problemas técnicos.
Dijo que es prácticamente imposible distinguir qué… pic.twitter.com/ieN6ICRsoi
Fin a la polémica por el gravamen
Con esta decisión, Sheinbaum puso fin a la polémica generada entre usuarios y comunidades de videojuegos, luego de que se planteara un impuesto de 8 por ciento a contenidos con una supuesta línea de violencia.
En lugar de un gravamen, la presidenta informó que el gobierno impulsará campañas dirigidas a jóvenes y adolescentes, enfocadas en la prevención de conductas violentas y adictivas.
“¿A dónde te puede llevar ese tipo de juegos? Muchos de ellos son en línea y generan una adicción al videojuego y promueven conductas de violencia”, señaló.
“Decidimos que el impuesto se quite, tiene muchas implicaciones, y que haya una campaña de construcción de la paz”, puntualizó.
Violencia y adicciones, un fenómeno emergente
Por su parte, el secretario de Salud, David Kershenobich, indicó que el tema central a revisar en torno a los videojuegos es el componente de violencia, luego de presentar la Encuesta Nacional de Adicciones 2025, comparada con la de 2016.
“Es un fenómeno nuevo, no había mucho en 2016 comparado con lo que hay ahora. Tenemos que analizar con mucho cuidado el contenido de los videojuegos; es un fenómeno nuevo que tiene lados positivos, pero hay que regular y ver el contenido que tiene”, explicó.
Añadió que la encuesta muestra que en muchos casos de violencia existe consumo de drogas y alcohol, lo que refuerza la necesidad de medidas preventivas integrales.


