El telescopio espacial Hubble publicó una nueva y detallada imagen de NGC 1792, una galaxia espiral altamente activa ubicada a más de 50 millones de años luz, en la constelación de Columba.
Una espiral caótica y llena de actividad
La Agencia Espacial Europea (ESA) destacó el intenso brillo del núcleo galáctico, rodeado por brazos espirales floculentos que revelan una estructura dinámica y turbulenta.
NGC 1792 es considerada una galaxia con brotes de formación estelar, es decir, un auténtico centro de creación de nuevas estrellas.
- Posee brazos ricos en regiones de formación estelar.
- Es inusualmente luminosa para su masa.
- Su intensa actividad se debe, en gran medida, a su interacción gravitacional con su vecina NGC 1808.
Our ESA/Hubble Picture of the Week features a stormy spiral galaxy ⛈️
— HUBBLE (@HUBBLE_space) December 1, 2025
NGC 1792 is a starburst galaxy 🌟 with its spiral arms rich in star-forming regions. It is close to a larger neighbour, NGC 1808, and their gravitational interaction is believed to have stirred up the gas in… pic.twitter.com/yPxunoXwlE
Interacciones que despiertan estrellas
Los astrónomos creen que la fuerte gravedad entre ambas galaxias ha revuelto el gas interno de NGC 1792, generando un incremento notable en la formación de estrellas, especialmente del lado donde la atracción gravitacional es más intensa.
Este comportamiento la convierte en un objetivo clave para quienes estudian la relación entre gas, cúmulos estelares y supernovas en galaxias activas.
Una imagen más profunda que nunca
Aunque el Hubble ya había observado esta galaxia en 2020, la nueva imagen integra datos recopilados hasta 2025, lo que permite una visión más completa de su actividad interna.
En la fotografía destacan las regiones rojas que aparecen en los brazos espirales: se trata de emisión H-alfa, un tipo de luz que proviene de nubes densas de hidrógeno molecular donde nacen nuevas estrellas.
Estas estrellas jóvenes irradian ultravioleta, ionizando el gas a su alrededor y generando ese característico resplandor rojo que delata la formación estelar en proceso.
La nueva observación confirma a NGC 1792 como un laboratorio natural ideal para comprender los procesos que dan forma y energía a las galaxias.


