Microsoft anunció que trabaja en la creación de una “superinteligencia humanista” (HSI, por sus siglas en inglés), un sistema de inteligencia artificial diseñado para servir a la humanidad sin perder el control humano sobre sus capacidades.
El proyecto está encabezado por Mustafa Suleyman, jefe de Microsoft AI y cofundador de DeepMind, quien lidera el recién creado Equipo de Superinteligencia MAI.
Una IA con límites claros
En una publicación en el blog corporativo, Suleyman explicó que la HSI no busca ser una entidad autónoma o ilimitada, sino “una IA cuidadosamente calibrada, contextualizada y con límites definidos”.
“Queremos explorar y priorizar cómo las formas más avanzadas de inteligencia artificial pueden mantener a la humanidad al mando, mientras aceleramos la solución de los desafíos globales más apremiantes”,
señaló el directivo.
What kind of AI does the world really want?
— Mustafa Suleyman (@mustafasuleyman) November 6, 2025
At @MicrosoftAI, we’re working towards Humanist Superintelligence (HSI): incredibly advanced AI capabilities that always work for, in service of, people and humanity.
And to do this we have formed the MAI Superintelligence Team. pic.twitter.com/cwregOiyY9
En entrevista con WIRED, Suleyman advirtió que crear sistemas que imiten la conciencia humana o superen su inteligencia sería “peligroso y erróneo”, por lo que Microsoft ha decidido rechazar la carrera por la inteligencia artificial general (IAG).
Aplicaciones prácticas de la HSI
En su primera etapa, la superinteligencia humanista se enfocará en tres áreas principales:
- Asistencia personal: un compañero de IA “económico” que ayudará a las personas a aprender, ser más productivas y sentirse acompañadas.
- Salud: ofrecerá un rendimiento de nivel experto en diagnósticos médicos, planificación y predicciones en entornos clínicos.
- Ciencia y medio ambiente: apoyará la investigación en energías limpias y reducción de emisiones de carbono, optimizando el desarrollo de nuevos avances tecnológicos.
Suleyman enfatizó que la HSI mantendrá siempre a los humanos al mando y que tendrá restricciones reales a su autonomía, evitando “abrir la caja de Pandora”.
“Es una IA al servicio de las personas, una IA subordinada y controlable”, afirmó.
Un movimiento estratégico en medio de la rivalidad con OpenAI
El anuncio llega tras la renegociación del acuerdo entre Microsoft y OpenAI, su principal aliado en materia de inteligencia artificial.
En 2023, Microsoft invirtió más de 10 mil millones de dólares en OpenAI, obteniendo derechos exclusivos para integrar sus modelos en servicios como Azure, Word y Excel. Sin embargo, los ajustes recientes permiten que ambas compañías desarrollen IA de forma independiente, lo que podría intensificar la competencia entre ellas.
Aunque Suleyman asegura que Microsoft no busca desarrollar una IAG, el lanzamiento de la superinteligencia humanista marca un paso decisivo en la evolución del campo de la IA, con una visión centrada en el control humano y el beneficio social.


