La presidenta Claudia Sheinbaum respondió a las críticas sobre una supuesta aprobación apresurada de la reforma a la Ley de Amparo, asegurando que el objetivo central de la iniciativa es reducir los tiempos de los juicios, que actualmente pueden prolongarse hasta 15 o 20 años.
“Se busca agilizar la justicia, pero se mantiene la figura del amparo como un mecanismo de protección para los ciudadanos frente a las acciones de autoridad”, afirmó la mandataria.
🚨Claudia Sheinbaum rechazó que la reforma a la Ley de Amparo elimine el derecho de los ciudadanos a ampararse o acceder a la suspensión provisional.
— Azucena Uresti (@azucenau) October 9, 2025
La presidenta aclaró que los señalamientos en contra son falsos y que la medida busca fortalecer la justicia sin afectar a la… pic.twitter.com/AYFXRn7OtT
Senado actúa con autonomía, señala Sheinbaum
Cuestionada sobre la posible intervención del coordinador de los senadores de Morena, Adán Augusto López, en la incorporación del artículo transitorio que ha generado controversia por su supuesta aplicación retroactiva, Sheinbaum subrayó que el Senado tiene plena autonomía.
Explicó que los legisladores consideraron que dicho artículo se apega a los criterios de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), según los cuales, en los juicios en curso debe aplicarse la ley vigente en cada etapa, mientras que en las etapas posteriores entraría en vigor la nueva legislación.
Aclaración sobre posible retroactividad
Sheinbaum reconoció que, desde la perspectiva del Poder Ejecutivo, la redacción inicial del artículo era confusa y podía dar pie a malas interpretaciones sobre una aplicación retroactiva.
Reiteró que, conforme a los criterios de la Corte, al tratarse de leyes de procedimiento, se mantiene la legislación vigente en la etapa actual del juicio y la nueva se aplica en las subsecuentes.
Evitar abusos en suspensiones
La presidenta también destacó que la reforma busca evitar abusos en la concesión de suspensiones provisionales.
Como ejemplo, mencionó los casos en los que la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) congela cuentas por presunto lavado de dinero, y los involucrados obtienen una suspensión para vaciar los recursos.
“Ahora se plantea que, cuando la UIF congele una cuenta, esta permanezca bloqueada hasta que concluya el juicio”, puntualizó Sheinbaum.