El presidente ruso, Vladimir Putin, anunció este lunes que Rusia continuará cumpliendo durante un año las principales limitaciones del Tratado de Reducción de Armas Estratégicas Ofensivas (START III), vigente con Estados Unidos hasta el 5 de febrero de 2026. La medida busca evitar una carrera armamentista y mantener la certidumbre y contención en materia nuclear, señaló Putin al abrir una reunión del Consejo de Seguridad de Rusia, según transmitió la televisión local.
"Rechazar por completo el legado de ese acuerdo sería, desde muchos puntos de vista, una medida errónea y miope que, en nuestra opinión, también incidiría negativamente en los objetivos del Tratado de No Proliferación de las Armas Nucleares", afirmó Putin.
Condiciones para mantener el acuerdo
Putin aclaró que esta extensión no implica una propuesta directa a Estados Unidos para renovar el tratado, sino que Moscú respetará las limitaciones durante un año y dejó abierta la posibilidad de desvincularse si considera que Washington altera el equilibrio estratégico.
"En el futuro, basándonos en el análisis de la situación, tomaremos una decisión definitiva sobre el mantenimiento de las restricciones voluntarias mencionadas. Creemos que esta medida sólo será viable si Estados Unidos actúa de manera similar", indicó el mandatario ruso.
Además, ordenó a los servicios de inteligencia vigilar las actividades estadounidenses relacionadas con el arsenal nuclear y el sistema de defensa antimisiles, incluyendo el posible despliegue de interceptores en el espacio, advirtiendo que cualquier acción desestabilizadora será respondida adecuadamente.
Diálogo y disuasión
Putin aseguró que la iniciativa podría facilitar la reanudación del diálogo estratégico con Estados Unidos, siempre que se normalice la relación bilateral y se resuelvan las disputas en materia de seguridad. Al mismo tiempo, reiteró que Rusia está lista para responder a cualquier amenaza con medidas militares y técnicas.
Como ejemplo, recordó la decisión de abandonar la moratoria sobre misiles terrestres de alcance medio y corto, justificada por la instalación de armas de Estados Unidos y aliados en Europa y Asia-Pacífico.
Contexto histórico del START III
El líder ruso afirmó que la administración de Joe Biden suspendió la aplicación plena del tratado en 2023, incluyendo inspecciones, por “política hostil y violaciones constantes de los principios del acuerdo”. No obstante, destacó que desde hace 15 años, START III mantiene el equilibrio de fuerzas y la certidumbre en armas estratégicas ofensivas.
El tratado limita a 1,550 ojivas nucleares y 700 sistemas balísticos a Rusia y Estados Unidos, incluyendo instalaciones terrestres, marítimas y aéreas.
Acusaciones de Estonia
En otro tema, el Kremlin calificó de “infundadas” las denuncias de Estonia, respaldadas por la OTAN, sobre la supuesta violación de su espacio aéreo por tres aviones rusos.
"Consideramos que estas acusaciones carecen de sentido y forman parte de una política desenfrenada que busca avivar la tensión", dijo Dimitri Peskov, vocero presidencial.