La Cineteca Nacional conmemora el 80 aniversario del bombardeo atómico a Hiroshima con la proyección del documental Visiones de Hiroshima, del cineasta venezolano Julio Martínez. La función será este miércoles a las 19:00 horas en la Sala 10 del recinto.
Hiroshima: la bomba que marcó la historia
A las 8:15 horas del 6 de agosto de 1945, la bomba atómica Little Boy explotó sobre Hiroshima, Japón, con una fuerza equivalente a 15 mil toneladas de dinamita. Se estima que la temperatura superó el millón de grados Celsius y que entre 70 mil y 80 mil personas murieron de inmediato. Otras miles fallecieron después por los efectos de la radiación.
Tres días más tarde, el 9 de agosto, una segunda bomba, Fat Man, cayó sobre Nagasaki, dejando entre 39 mil y 80 mil muertos.
Un documental con visión latinoamericana
Visiones de Hiroshima se proyectará por tercera vez en México, luego de haberse presentado en 2010 en Radio UNAM y en 2015 en Casa del Lago. La película, realizada con producción y música original de Mari Sano, ha sido exhibida en países de América del Sur como Venezuela, Argentina, Colombia y Ecuador.
El documental reúne:
- Testimonios de sobrevivientes
- Material de archivo
- Fragmentos de películas
- Interpretaciones artísticas
Una reseña publicada en el diario argentino Página/12 en 2010 lo describe como “un homenaje que no deja de lado la perspectiva latinoamericana” y destaca el valor del material poco difundido que incluye.
“Por el nivel del conocimiento puesto al servicio de la violencia indiscriminada, aquella locura significó —junto al Holocausto— el inicio de un cambio cualitativo en los mecanismos que se utilizan para aniquilar hombres y mujeres”, señaló el periodista Facundo Díaz.
Más que cine: arte, memoria y paz
Durante la función también se estrenará un cortometraje del mexicano Santiago Torres sobre el Parque de la Paz en Hiroshima, que incluye comentarios de miembros de la organización japonesa Nihon Hidankyo, galardonada en 2024 con el Premio Nobel de la Paz.
Además, se presentará la instalación El lago de las grullas, un proyecto colaborativo de Mari Sano compuesto por 51 figuras de origami, símbolo de paz y esperanza. Las figuras fueron creadas por personal de la Cineteca Nacional, la UNAM y profesionales del sector salud.
“Vivimos un momento muy lamentable: no sabemos cuándo lanzarán otra vez este tipo de bombas”, declaró Mari Sano. “Este 80 aniversario es un momento clave para enviar un mensaje de unión y paz al mundo.”
La artista subrayó que esta será la última exhibición del documental en su gira internacional, pero insistió en la necesidad de mantener viva la memoria del horror nuclear, en un contexto global marcado por conflictos bélicos.