Cinco años después de su presentación, el Cybertruck de Tesla se perfila como un fracaso comercial, con apenas 20 mil unidades vendidas al año, lejos de las 250 mil previstas inicialmente. Ante esta situación, la compañía ya explora la posibilidad de lanzar una camioneta eléctrica más pequeña y funcional.
De experimento futurista a decepción en ventas
Desde su debut en 2019, el propio Elon Musk advirtió que el diseño del Cybertruck no sería para todos. La camioneta, con carrocería de acero inoxidable, líneas geométricas extremas y sin controles tradicionales, fue concebida como una ruptura con los diseños convencionales. Sin embargo, esa misma excentricidad terminó alejando a potenciales compradores, incluyendo a muchos seguidores de la marca.
La apuesta por una estética disruptiva no fue suficiente: su manejo en ciudad es complicado, la autonomía está por debajo de lo prometido y la interfaz digital ha sido criticada por priorizar el asombro sobre la funcionalidad.
Tesla evalúa nuevo modelo más accesible
En declaraciones a Electrek, Lars Moravy, vicepresidente de ingeniería de Tesla, reveló que se está discutiendo un nuevo modelo de camioneta, más pequeño y práctico, aunque por ahora no hay una decisión oficial. El enfoque apunta a responder a nuevas necesidades de movilidad en un entorno dominado por robotaxis y plataformas de entrega autónoma.
“El objetivo no es solo reemplazar al Cybertruck, sino repensar lo que debe ser un vehículo funcional en el futuro”, señaló el ejecutivo.
Tesla, rezagada frente a sus competidores
Mientras fabricantes como BYD, Hyundai, Rivian y GM han lanzado nuevos modelos eléctricos en los últimos años, Tesla solo ha presentado uno en el último lustro. Sus promesas de cinco nuevos programas de producto no se han concretado, en parte por haber concentrado esfuerzos en el desarrollo de la autonomía total, que aún no se materializa.
Este estancamiento ha erosionado el liderazgo de la empresa en el sector, tanto en innovación como en volumen de producción.
¿Un giro estratégico a tiempo?
La idea de una camioneta más pequeña, funcional y asequible podría representar un nuevo punto de entrada al ecosistema eléctrico de Tesla, lejos del enfoque radical del Cybertruck.
Por ahora, la propuesta está en fase de exploración, pero la presión es evidente. El fracaso del Cybertruck obliga a Tesla a replantear su identidad y a competir en un mercado donde ya no tiene el monopolio de la innovación.