El gobierno británico anunció la implementación del uso de medicamentos supresores del impulso sexual en delincuentes sexuales como parte de un nuevo paquete de medidas para reducir la reincidencia y aliviar la saturación en el sistema penitenciario.
La medida fue dada a conocer por la secretaria de Justicia, Shabana Mahmood, quien explicó que el programa se aplicará en 20 prisiones de dos regiones y que incluso se analiza hacerlo obligatorio en ciertos casos.
“Es vital que este enfoque se lleve a cabo junto con intervenciones psicológicas que aborden otras causas de la delincuencia, como la afirmación de poder y control”, expresó ante el Parlamento.
Chemical castration to manage sex offenders will be rolled out nationally, announces Justice Secretary @ShabanaMahmood
— ITVPolitics (@ITVNewsPolitics) May 22, 2025
She said the government is exploring whether this can be introduced on a mandatory basis pic.twitter.com/uSjbhyCnim
Castración química: antecedentes y resultados
Aunque no todos los delincuentes sexuales son motivados por impulsos sexuales —como los casos asociados al abuso de poder—, los estudios muestran que la castración química puede reducir la reincidencia hasta en 60 por ciento.
Este tratamiento ya se aplica de manera voluntaria en Alemania y Dinamarca, y de forma obligatoria en algunos casos en Polonia.
Reforma penitenciaria integral
La iniciativa forma parte de una revisión amplia del sistema de justicia, encabezada por el ex secretario David Gauke, que recomienda una reforma profunda del sistema penitenciario del Reino Unido, actualmente al límite de su capacidad.
Entre las recomendaciones:
- Liberación anticipada de reclusos para despresurizar cárceles
- Más flexibilidad para los jueces en sentencias alternativas
- Eliminación de penas menores a 12 meses, salvo casos excepcionales
- Deportación inmediata de extranjeros con sentencias menores a tres años
- Inversión en libertad condicional y en supervisión con etiquetas electrónicas
The prisons crisis demands a new era of reform. My @NewStatesman piece on the Independent Sentencing Review’s recommendations. https://t.co/k2HUn1e7Yu
— David Gauke (@DavidGauke) May 22, 2025
Presión sobre el sistema judicial
Mahmood, quien asumió el cargo tras el regreso del Partido Laborista al poder en julio pasado, destacó que uno de sus primeros pasos fue autorizar un programa de liberación anticipada de prisioneros para liberar espacio en las cárceles.
“Si nuestras prisiones colapsan, los tribunales deben suspender juicios. El crimen queda impune, los criminales se descontrolan y reina el caos. Nos enfrentamos al colapso de la ley y el orden en este país”, advirtió.
En respuesta a las recomendaciones, el gobierno destinará 700 millones de libras esterlinas anuales a la libertad condicional.
Críticas desde la oposición
Desde el Partido Conservador, el portavoz de justicia Robert Jenrick criticó la eliminación de sentencias cortas, señalando que podría significar, en la práctica, la despenalización de delitos menores como robo o agresión.
Should someone go to jail for sexual assault? Head-butting their partner? Or breaking into someone's home with knife?
— Robert Jenrick (@RobertJenrick) May 21, 2025
Keir Starmer and Labour think not.
They're about to scrap short prison sentences, putting more criminals on the streets.
This is a dangerous mistake. pic.twitter.com/LjJgTNEfR3
También desestimó el uso de etiquetas de monitoreo, comparándolas con “alarmas de humo apagando hogueras”.
Mahmood respondió que el nuevo gobierno está corrigiendo “el desorden dejado por los conservadores” y subrayó que se está llevando a cabo la mayor expansión penitenciaria desde la época victoriana.