La presidenta Claudia Sheinbaum emitirá esta semana un decreto para restituir 2 mil 471 hectáreas de territorio en la región de Huajimic, Nayarit, a la comunidad wixárika de San Sebastián Teponahuaxtlán y su anexo Tuxpan de Bolaños (Wuaut+a-Kuruxi Manuwe). Esta superficie equivale a más de tres veces el tamaño del Bosque de Chapultepec.
Con esta entrega, se alcanzarán 5 mil 946 hectáreas restituidas desde 2016, es decir, un 56.7% del total reclamado por los wixaritari en la zona limítrofe entre Nayarit y Jalisco.
El decreto será anunciado el 8 de mayo durante una visita de Sheinbaum a la comunidad. Incluye una compensación de 158 millones 264 mil pesos para los 15 posesionarios actuales de las tierras.
“Es la mayor recuperación de territorio ancestral hasta ahora”, señaló Carlos González, abogado de la comunidad.
Desde hace décadas, las tierras estuvieron en manos de pequeños propietarios y ganaderos nayaritas que se negaban a entregarlas sin recibir una indemnización, a pesar de que la comunidad wixárika había obtenido fallos agrarios favorables basados en títulos virreinales, anteriores a los documentos de propiedad exhibidos por los mestizos.
El proceso ha sido acompañado por la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI) y la consejería jurídica de la Presidencia.
El pasado 29 de abril, se firmaron los convenios finiquito entre la comunidad y los posesionarios, para garantizar una entrega conciliada de las tierras en cumplimiento de las sentencias emitidas por el Tribunal Unitario Agrario del Distrito 16.
El tribunal ordenó ejecutar la restitución del territorio los días 5, 6 y 7 de mayo. Según Carlos González, hasta antes de la Caravana por la dignidad wixárika realizada en 2022, sólo se habían ejecutado 290 hectáreas a favor de los wixaritari.
“Esa cantidad representaba apenas 2.8 por ciento del total reclamado, lo que mostró la importancia de la caminata y la perseverancia de la comunidad”, expresó.
El conflicto comenzó formalmente en 2007, aunque las primeras restituciones se realizaron en 2016 durante el gobierno de Enrique Peña Nieto. En ese sexenio, sólo se devolvieron 184 hectáreas en 2016 y 63 en 2017. Más adelante, en 2021, ya bajo el mandato de Andrés Manuel López Obrador, se restituyeron otras 42 hectáreas.
Tras la marcha wixárika de 2022 y el compromiso presidencial, el proceso avanzó con 11 entregas entre mayo y noviembre de 2023, y dos más en 2024. En total, hasta antes del nuevo decreto, 3 mil 475 hectáreas habían sido devueltas.
Ahora, con la suma de las 2 mil 471 hectáreas, el total alcanzará las 5 mil 946 restituidas. Los recursos para esta última devolución provienen de una partida presupuestal extraordinaria instruida por Sheinbaum.
“Se espera que en los próximos años se asignen recursos en el presupuesto federal para indemnizar por las 4 mil 550 hectáreas restantes”, indicaron autoridades.
La negativa de los posesionarios a entregar las tierras generó tensiones y episodios de violencia en Huajimic. En 2016, tras una de las primeras ejecuciones, hubo destrucción de viviendas wixaritari y ocupación ilegal de otras 64 hectáreas. Los comuneros incluso enfrentaron amenazas armadas.
Por ello, la comunidad exigió al gobierno federal intervenir con un esquema de pagos y acuerdos pacíficos, lo que permitió reactivar el proceso de restitución.