Paco Ignacio Taibo II, director del Fondo de Cultura Económica (FCE), alertó sobre una pérdida “incalculable” de lectores en el sector adolescente y juvenil, a diferencia de lo que ocurre con niños y adultos mayores, donde la lectura ha crecido de forma notable.
Durante su participación en la conferencia La Mañanera del Pueblo, Taibo explicó que captar a los jóvenes ha sido un reto constante:
“Nos hemos roto la cabeza de mil maneras para llegar a ellos. Han migrado hacia formas de diversión más inmediatas y superficiales, lo que ha alejado a muchos de la lectura”.
TAIBO II Mañanera 02/05/25 https://t.co/ZwJLNqsROb
— Fondo de Cultura Económica (@FCEMexico) May 2, 2025
Estrategias para reconectar con jóvenes
El también historiador propuso usar plataformas como TikTok como aliados, no como enemigos. “Hay que capturar TikTok, no competir. Yo lo uso, leo manga y no por eso pierdo mi capacidad de explicar durante una hora quién fue Leonardo da Vinci”.
Subrayó que la clave está en apropiarse de los medios digitales con contenido atractivo y creativo:
“No se trata de pelear contra la música o los teléfonos, sino de usarlos a favor del fomento a la lectura”.
Criticó las campañas que imponen o prohíben:
“El peor error es decir ‘apaga la tele y enciende un libro’. Hay que leer en los intermedios, jugar hasta aburrirse… y luego leer. Las campañas se deben construir en positivo, no en negativo”.
Nuevas iniciativas
Taibo anunció que a finales de este año se lanzará una colección juvenil de 25 títulos que será distribuida gratuitamente en México y otros países de América Latina como Argentina, Colombia, Cuba, Venezuela, Chile, Paraguay, Honduras y Guatemala.
Se trata de 2.5 millones de libros con obras de autores como Gabriel García Márquez, Mario Benedetti, Eduardo Galeano, Piedad Bonnett y Adela Fernández.
“Es el proyecto más grande de fomento a la lectura para jóvenes en la región”, destacó.
También informó que esta semana se inauguraron redes de clubes de lectura en reclusorios de alta seguridad y dentro del programa Mujeres Sembradoras.
El motor: la curiosidad
Taibo enfatizó que la curiosidad es el verdadero motor de la lectura. A modo de ejemplo, dijo que el mejor padre promotor de lectura es aquel que deja un libro en la mesa de noche de su hijo sin decirle nada:
“Ese niño pensará: ¿cómo llegó este libro aquí? ¿quién lo dejó? Eso despierta el deseo de leer”.
Por último, recordó una anécdota en Mexicali, donde niños deportados que participaron en una actividad de lectura se fugaron del albergue. Doce de ellos regresaron y fundaron un exitoso club llamado Patitos en libertad.
“Queremos que los libros sean una vía de libertad”, concluyó.