El gobierno de Donald Trump ordenó a dos agencias de inteligencia de EU fortalecer la vigilancia por satélite en la frontera con México como parte de su estrategia contra la inmigración irregular y el narcotráfico.
La Agencia Nacional de Inteligencia Geoespacial (NGA) y la Oficina Nacional de Reconocimiento (NRO), ambas dependientes del Departamento de Defensa, supervisan satélites espía y analizan imágenes para el Pentágono y otras agencias de inteligencia.
Este refuerzo, junto con el despliegue de tropas, evidencia una creciente militarización de la frontera sur, donde Trump declaró una emergencia nacional. No está claro si esta iniciativa recopilará imágenes del territorio estadounidense.
U.S. Boosts Mexico Border Surveillance with Spy Tech
— First Source Report (@FirstSourceNew) March 27, 2025
The U.S. has expanded surveillance along the U.S.-Mexico border using spy satellites, planes, and radar.
Spy Satellites: Two U.S. intelligence agencies have been ordered to focus satellite surveillance on the border to… pic.twitter.com/zubqhsoi7j
La NGA informó que creó un grupo de trabajo para coordinar su “apoyo a la misión fronteriza de EU”, mientras que la NRO señaló que colabora con el Pentágono y la comunidad de inteligencia para “asegurar las fronteras de EU”.
Esta medida forma parte de las órdenes ejecutivas de Trump para frenar el tráfico de personas y cruces ilegales, así como para deportar a inmigrantes en situación irregular, estimados en hasta 14 millones de personas.
El gobierno de EU ha usado drones e inteligencia artificial (IA) en la vigilancia fronteriza por años, pero ahora busca expandir las capacidades militares destinadas tradicionalmente a conflictos en el extranjero. Fuentes cercanas indican que la IA podría utilizarse para identificar personas u objetos en imágenes satelitales, similar a su uso en operaciones militares.

El alcance exacto de este esfuerzo no está definido, pero podría generar preocupaciones sobre las restricciones legales a la vigilancia de ciudadanos y residentes legales. Las regulaciones permiten registros físicos dentro de un radio de 185 kilómetros desde la frontera, abarcando ciudades como San Diego y El Paso.
Paul Rosenzweig, experto en seguridad nacional, advirtió que la vigilancia solo debería aplicarse en territorio extranjero, aunque su implementación real es un tema de supervisión.
— Paul Rosenzweig (@RosenzweigP@thecooltable.wtf) (@RosenzweigP) March 27, 2025
Un portavoz de la Oficina del Director de Inteligencia Nacional aseguró que todas las actividades de inteligencia son “legales y autorizadas”, respetando la privacidad y las libertades civiles de los ciudadanos de EU. No obstante, la NGA y la NRO se negaron a detallar qué información están recopilando y si incluye territorio estadounidense, citando razones de seguridad operativa.