Investigadores afirman que un procesador de recocido cuántico resolvió en minutos un problema que tomaría millones de años a una supercomputadora clásica. Además, ejecutar este cálculo en una supercomputadora consumiría más energía de la que el mundo usa en un año. Sin embargo, otro equipo asegura haber resuelto una parte del problema en poco más de dos horas con una supercomputadora clásica.
Las computadoras cuánticas aprovechan la mecánica cuántica para procesar información de forma más eficiente que las computadoras convencionales. Aunque han demostrado ventajas en problemas aleatorios, aún no superan a las computadoras clásicas en aplicaciones prácticas.
Un nuevo hito en la computación cuántica
En el estudio más reciente, investigadores de D-Wave Quantum Inc. en Canadá utilizaron un procesador de recocido cuántico para simular la evolución de materiales magnéticos llamados vidrios de espín, relevantes en la ciencia de materiales y la industria.

“Los materiales magnéticos son esenciales en dispositivos como celulares y sensores médicos”, explica Mohammad Amin, científico en D-Wave.
El equipo probó su modelo en sistemas de dos, tres e infinitas dimensiones, y concluyó que las supercomputadoras clásicas no pueden resolver el problema en un tiempo razonable.
“Hemos demostrado la supremacía cuántica en un problema real por primera vez”, afirma Andrew King, de D-Wave.
Daniel Lidar, físico en la Universidad del Sur de California, califica el avance como “muy impresionante”, señalando que el hardware de D-Wave logró simulaciones imposibles para los métodos clásicos actuales.
¿La computación clásica puede igualar a la cuántica?
La afirmación ha generado controversia. Un equipo liderado por Joseph Tindall, del Instituto Flatiron, analizó parte del mismo problema con una supercomputadora clásica, usando un algoritmo de propagación de creencias desarrollado hace 40 años.

En su estudio, publicado en arXiv.org, afirman que su enfoque supera al cuántico en ciertos casos de sistemas en dos y tres dimensiones. Sin embargo, ambos equipos discrepan sobre si la computación clásica puede igualar completamente los resultados cuánticos.
No obstante, la computadora cuántica sí mostró una ventaja clara en el sistema de dimensiones infinitas, útil en inteligencia artificial. Simularlo en una computadora clásica requeriría un enfoque completamente distinto, lo que deja abierta la pregunta de si la computación cuántica ha ganado esta ronda.