‘El Gran León’ fue pianista de Daniel Santos, Toña ‘la Negra’ y Celia Cruz, hasta que formó su propia orquesta, Pepe Arévalo y sus Mulatos.
Murió el músico Pepe Arévalo, ‘El León de la Salsa’
El mundo de la música latina está de luto tras el fallecimiento de Pepe Arévalo, conocido en el ámbito artístico como ‘El Gran León’ o ‘El León de la Salsa’. El músico mexicano, quien a lo largo de su carrera dejó una huella imborrable en el género de la salsa y la música afroantillana, murió a los 87 años debido a un infarto cerebral, luego de permanecer varias semanas hospitalizado.
Un legado musical que perdura
“Tenía que descansar… ya la última semana fue muy complicada. Ya descansa, nos deja un legado enorme”, comentó su hijo, José Luis Arévalo, en un mensaje emotivo que hizo eco en diversos medios de comunicación. El periodista, quien también compartió momentos difíciles junto a su padre durante su hospitalización, anticipó que el 9 de marzo se llevará a cabo un homenaje a ‘El León de la Salsa’ en el Sindicato de Músicos. Esta será una oportunidad para honrar su vida y su vasta carrera, que marcó la historia de la salsa y la música tropical.
El Gran León: El origen de su apodo
Una de las preguntas más frecuentes sobre Pepe Arévalo es el origen de su apodo ‘El Gran León. Esta historia fue narrada por el propio músico en una semblanza publicada en 1995. Según contó Arévalo, a principios de la década de los 80, cuando ya gozaba de fama y éxito, comenzó a sentir la necesidad de hacer algo diferente. Fue entonces cuando decidió abrir un bar en la colonia Roma, específicamente en la calle Querétaro, llamado ‘Bar León’.
Pero, ¿Cómo surgió el nombre ‘El Gran León’? Según Pepe Arévalo, fue la periodista y actriz Lourdes Guerrero quien le sugirió el nombre, tomando inspiración de un libro que le regaló llamado “El Gran León de Dios” de Taylor Caldwell. “Fue Lourdes la que salió con el nombre: El Gran León”, recordó el músico. Así, el nombre no solo se asoció con su bar, sino que también se convirtió en una parte esencial de su identidad artística, adoptando una simbología que lo haría conocido en todos los rincones de la música latina.
Una vida dedicada a la música
Pepe Arévalo, cuyo nombre real era Josué Ambrosio Arévalo Gama, nació en la Ciudad de México el 11 de febrero de 1938. Desde muy joven, se unió a grupos de Son que tocaban en el Distrito Federal y Acapulco. Fue en 1978 cuando formó su propia orquesta, conocida como ‘Pepe Arévalo y sus mulatos’, con la que alcanzó gran popularidad tanto a nivel nacional como internacional. A lo largo de su carrera, colaboró con grandes figuras de la música como Celia Cruz, Toña ‘La Negra’ y Daniel Santos.
Con su orquesta, Pepe Arévalo alcanzó grandes éxitos que siguen siendo parte fundamental del repertorio de salsa. Entre sus canciones más conocidas destacan:
- Falsaria
- Salomé
- Las mujeres más bellas
- Jaula dorada
- Adiós mariquita linda
- Urge
- Caballo Viejo
- Pedro Navajas
- Qué de raro tiene
Un espacio cultural en la Ciudad de México
Además de su exitosa carrera musical, Pepe Arévalo fue un defensor de la cultura afroantillana. Durante años, promovió el movimiento ‘La rumba es cultura’, creando un espacio para la música y las artes en el Bar León, que se convirtió en un lugar de encuentro para artistas, intelectuales y amantes de la salsa. En este lugar se realizaron filmaciones de películas como El mil usos, Hotel, Las glorias del gran Púas, y telenovelas como Cuando llega el amor.
En una de sus entrevistas, Arévalo mencionó: “Yo considero que este lugar ya no es mío, sino que es un patrimonio de esta ciudad”, reflejando su profundo amor por su ciudad natal y por el legado cultural que dejó en el Bar León.
Reconocimiento póstumo
En agosto de 2020, Pepe Arévalo fue reconocido por la Lotería Nacional para la Asistencia Pública, que le dedicó su Sorteo Zodiaco No. 1496, una distinción que resalta su importancia no solo en la música, sino también en la cultura mexicana y latinoamericana.
El adiós a un grande
Pepe Arévalo no solo fue un músico destacado, sino también un hombre que dejó una marca indeleble en la historia de la salsa. A lo largo de su vida, se ganó el cariño de miles de seguidores y colegas, que lo recordarán por su talento, su pasión por la música y su legado cultural. Aunque ya no esté físicamente con nosotros, su música continuará vibrando en cada rincón de la salsa, y su apodo de ‘El León de la Salsa’ seguirá resonando como símbolo de su grandeza en la música.
La salsa ha perdido a una de sus figuras más emblemáticas, pero su legado vive en cada nota y en cada baile.