El Gobierno de Claudia Sheinbaum ha declarado 2025 como el Año de la Mujer Indígena, un esfuerzo por resaltar el papel fundamental de las mujeres en la humanidad, particularmente en la lucha por la emancipación y los derechos de los pueblos indígenas. En este contexto, el Gobierno ha elegido cuatro mujeres emblemáticas de las culturas mexica, maya, mixteca y tolteca para representar esta conmemoración, y entre ellas destaca Xiuhtlaltzin, la primera gobernante tolteca.
Xiuhtlaltzin: la primera reina tolteca
Xiuhtlaltzin fue la séptima gobernante de los toltecas y una de las pocas mujeres que asumió el liderazgo en una sociedad históricamente dominada por hombres. Gobernó la ciudad de Tollan-Xicocotitlán (actual Tula, Hidalgo) a finales del siglo IX junto con su esposo Mitl, consolidando a la ciudad como un centro político, económico y cultural clave de la región. Tras la muerte de Mitl, la tradición dictaba que su hijo Tecpalcatazin debía sucederlo. Sin embargo, el pueblo tolteca rompió con las normas establecidas y proclamó a Xiuhtlaltzin como gobernante, reconociendo su liderazgo y compromiso con la comunidad.
Xiuhtlaltzin gobernó durante cuatro años hasta su fallecimiento, y fue enterrada junto a su esposo en el templo de la Diosa Rana, un acto que simbolizaba el respeto y la admiración del pueblo hacia su figura.
La situación de las comunidades indígenas en México
Este homenaje a Xiuhtlaltzin ocurre en un contexto de desigualdad persistente para las comunidades indígenas en México. Según el Censo de Población y Vivienda 2020, más de 7,3 millones de personas en el país hablan lenguas indígenas, representando el 6.1% de la población total, pero a pesar de ello enfrentan altos niveles de pobreza, marginación y discriminación. Además, entre 2019 y 2023, al menos 46 defensores indígenas fueron asesinados o desaparecidos debido a su trabajo en la protección de sus territorios y derechos.
En respuesta a estas condiciones, el Gobierno de Sheinbaum ha tomado algunas medidas importantes para restituir derechos a las comunidades indígenas. En diciembre de 2024, la presidenta firmó decretos para devolver 2.178 hectáreas de tierras comunales a los pueblos rarámuris en la Sierra Tarahumara, un paso hacia la justicia social para los pueblos originarios.
El debate sobre la representación indígena
El nombramiento de Xiuhtlaltzin como uno de los símbolos del Año de la Mujer Indígena ha generado debate. Algunos historiadores y activistas, como la escritora Yásnaya Elena A. Gil, señalan que el término “indígena” es una construcción colonial y que figuras históricas como Xiuhtlaltzin no se identificaban con esa categoría. Gil argumenta que las mujeres de culturas como la maya, mexica y mixteca no fueron categorizadas como “indígenas” en su tiempo y, por lo tanto, no sufrieron los efectos del racismo estructural asociado a esa etiqueta.
Otras mujeres representadas en el Año de la Mujer Indígena
Junto a Xiuhtlaltzin, otras tres mujeres destacadas han sido elegidas como símbolos del Año de la Mujer Indígena:
- Tecuichpo – Ixcaxochitzin (mexica),
- Tz’ak-b’u Aha (maya, conocida como la Reina Roja),
- Señora 6 Mono (mixteca, de Huachino).
Conclusión
El Año de la Mujer Indígena tiene como objetivo visibilizar las luchas históricas y actuales de las mujeres indígenas en México, pero también ha abierto un espacio para reflexionar sobre la representación simbólica y la necesidad de acciones concretas más allá de los gestos. La figura de Xiuhtlaltzin como gobernante tolteca resalta la fuerza histórica de las mujeres indígenas, pero también plantea interrogantes sobre cómo reconocer y actuar frente a las desigualdades persistentes que enfrentan estas comunidades.