Un avión de pasajeros con 60 viajeros y cuatro tripulantes a bordo chocó el miércoles con un helicóptero del Ejército mientras aterrizaba en el Aeropuerto Nacional Ronald Reagan, cerca de Washington. El incidente desató una gran operación de búsqueda y rescate en el río Potomac.
Hasta el momento, no se han reportado víctimas ni se ha determinado la causa de la colisión. Sin embargo, todos los vuelos en el aeropuerto fueron suspendidos mientras helicópteros de agencias policiales sobrevolaban la zona en busca de sobrevivientes. Balsas inflables de rescate fueron desplegadas en el río Potomac desde un punto cercano a la autopista George Washington, al norte del aeropuerto.
El presidente de EE.UU., Donald Trump, declaró haber sido “informado completamente sobre este terrible accidente” y expresó: “Que Dios bendiga sus almas”, en referencia a los pasajeros.
Detalles del accidente
La Administración Federal de Aviación (FAA) informó que el choque ocurrió aproximadamente a las 9:00 p.m., cuando un jet regional, que había partido de Wichita, Kansas, impactó contra un helicóptero militar Blackhawk mientras se aproximaba a la pista del aeropuerto. La colisión se produjo en uno de los espacios aéreos más controlados del mundo, a poco más de 4,8 kilómetros (3 millas) al sur de la Casa Blanca y el Capitolio.
Los investigadores intentarán reconstruir los últimos momentos previos al impacto, incluyendo las comunicaciones con los controladores de tráfico aéreo y una aparente pérdida de altitud del jet comercial.
Datos del vuelo
El vuelo 5342 de American Airlines se encontraba a unos 121 metros (400 pies) de altitud y viajaba a una velocidad de aproximadamente 225 kilómetros por hora (140 millas por hora) cuando sufrió una repentina pérdida de altura sobre el río Potomac, según registros de su transpondedor. La aeronave, un Bombardier CRJ-701 fabricado en Canadá en 2004, puede configurarse para transportar hasta 70 pasajeros.
Minutos antes del aterrizaje, los controladores de tráfico aéreo solicitaron a los pilotos del jet si podían aterrizar en la pista 33, la más corta del aeropuerto. Tras confirmar que podían hacerlo, se les autorizó el cambio. Datos de seguimiento de vuelos indican que la aeronave ajustó su aproximación conforme a la nueva instrucción.
Menos de 30 segundos antes del impacto, un controlador preguntó al helicóptero si tenía contacto visual con el avión entrante. Luego, hizo otra llamada por radio: “PAT 25, pase detrás del CRJ”. Segundos después, las aeronaves colisionaron.
El transpondedor del avión dejó de transmitir aproximadamente a 730 metros (2.400 pies) de la pista, en medio del río Potomac.
Consecuencias y reacción
La torre de control de inmediato comenzó a desviar otros vuelos. Un video de una cámara de seguridad en el Centro Kennedy captó el momento en que dos conjuntos de luces, aparentemente de aeronaves, se fusionaban en una bola de fuego.
El Aeropuerto Nacional Ronald Reagan, ubicado junto al río Potomac, es una opción popular entre los viajeros debido a su proximidad a Washington D.C., en comparación con el Aeropuerto Internacional Dulles, que se encuentra más al interior de Virginia.
Las autoridades continúan con las labores de búsqueda y rescate mientras se investigan las causas de la tragedia.