Washington, D.C. – El presidente Donald Trump firmó este miércoles 29 de enero su primer proyecto de ley en su nueva administración, conocido como la Ley Laken Riley, que exige la detención de inmigrantes no autorizados acusados de delitos como robo y violencia. La ley, que obtuvo apoyo bipartidista tanto en la Cámara como en el Senado, fue testigo de la presencia del senador demócrata John Fetterman, quien participó en la firma del proyecto en la Casa Blanca.
¿Quién era Laken Riley y por qué se hizo una ley?
Laken Riley, una joven de 22 años, estudiante de la Facultad de Enfermería de la Universidad de Augusta, fue asesinada el 22 de febrero de 2024 por José Antonio Ibarra, un inmigrante venezolano indocumentado. Ibarra, quien había sido arrestado previamente en 2022 por entrada ilegal en EE.UU., fue liberado mientras su caso migratorio estaba pendiente. Tras un juicio, Ibarra fue declarado culpable de asesinato y otros delitos, recibiendo una condena a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.
Trump y otros republicanos culparon al expresidente Joe Biden por la muerte de Riley, argumentando que Ibarra debería haber sido deportado en lugar de ser liberado. La tragedia se convirtió en un grito de guerra para la campaña presidencial de Trump, quien usó el caso para criticar las políticas migratorias de la administración Biden.
¿Qué establece la Ley Laken Riley?
La nueva ley exige que los funcionarios federales detengan a migrantes arrestados o acusados de delitos como robos en tiendas o agresiones a oficiales de policía, así como aquellos que hayan causado daño o muerte a otras personas. La senadora Katie Britt, quien impulsó el proyecto de ley en el Senado, destacó que cualquier migrante que cometa un delito no debería tener la libertad de permanecer en las calles de EE.UU.
Además, la ley otorga a los fiscales generales estatales la facultad de demandar al gobierno federal por fallas en la aplicación de la ley de inmigración que afecten a los estados o a las personas, como la liberación de inmigrantes bajo órdenes de deportación.
La ley fue apoyada por 46 demócratas en la Cámara y 12 en el Senado, a pesar de la fuerte oposición de activistas de derechos humanos y grupos defensores de inmigrantes, quienes consideran que la medida podría resultar en un aumento de detenciones y deportaciones injustas.
Con esta firma, Trump reafirma su enfoque en la inmigración como uno de los pilares de su administración, anunciando que esta ley es solo el comienzo de reformas más estrictas en materia migratoria.