La Oficina europea de la Organización Mundial de la Salud (OMS) alertó contra el levantamiento prematuro de las restricciones debido a que la transmisión sigue siendo alta y al riesgo por las nuevas mutaciones del Sars-CoV-2.
“No nos olvidemos de las lecciones que hemos aprendido de forma tan cruda: abrir y cerrar rápidamente es una estrategia pobre”, dijo en rueda de prensa el director regional de la OMS, Hans Kluge.
Kluge señaló que la mejor opción es introducir y levantar “de forma gradual” medidas basándose en criterios epidemiológicos, de acuerdo con una estrategia “moderada”.
Treinta países han registrado un descenso “significativo” en el número de nuevos casos en los últimos 14 días, siete más que hace dos semanas, pero las tasas de propagación continúan siendo “muy altas”, a lo que se une “la mayor incertidumbre y riesgo” que presentan las nuevas variantes del coronavirus, más contagiosas.
La mutación británica ha sido detectada en 33 países y, la sudafricana, en 16, además de que hospitales, escuelas y centros de asistencia han informado de brotes con esas variantes.
URGENCIA POR VACUNAR A GRUPOS DE RIESGO
“Es necesario recordar que solo algo más del 3% de la población en la región europea ha sido infectada de COVID-19. Las áreas golpeadas duramente una vez pueden serlo de nuevo”, advirtió Kluge.
Más de 700 mil europeos han muerto por la COVID-19, y aunque la curva de contagio en el continente se encuentra en una meseta, la semana pasada se registró un récord de 38 mil nuevos decesos.
Kluge resaltó también la “paradoja” creada por el inicio de la campaña de vacunación y el riesgo generado por las mutaciones, lo que aumenta la urgencia de vacunar a los grupos de riesgo.
“La expectación creciente por la evolución de la ciencia y la vacunación y una distribución justa no están siendo satisfechas tan rápido como nos habría gustado”, lamentó el director de la oficina regional de la OMS, con sede en Copenhague