Más de 60 mil voluntarios han recibido alguna de las cuatro candidatas chinas a vacuna contra el coronavirus “sin presentar efectos adversos significativos”, afirmó un alto funcionario del Ministerio de Ciencia y Tecnología de China.

Más de 60 mil voluntarios han recibido alguna de las cuatro candidatas chinas a vacuna contra el coronavirus “sin presentar efectos adversos significativos”, afirmó un alto funcionario del Ministerio de Ciencia y Tecnología de China.

“Será un precio aceptable para el público general. La vacuna inactivada tendrá un coste mayor en comparación con el resto”, dijo Zheng.

Asimismo, el funcionario negó que China haya puesto en marcha una “diplomacia de vacunas” con todas las pruebas que el país realiza en diversos países, muchos de ellos en vías de desarrollo.

“Lo que hace China es trabajar con otros países para desarrollar la vacuna y contribuir a que ésta sea segura y pueda estar disponible para quien lo necesite”, afirmó Zheng, quien puso como ejemplo la entrada del país asiático en COVAX, la plataforma mundial de investigación de vacunas contra la COVID-19.

PROTEGER A LOS CHINOS EN EL EXTRANJERO
El funcionario indicó además que las vacunas que el país administra desde julio para casos especiales tampoco han mostrado efectos adversos, y que su “su uso ha seguido un proceso científico riguroso aprobado por las autoridades”.

Zheng señaló que ciudadanos chinos que trabajan en el extranjero ya han recibido estas vacunas de forma voluntaria.

“China todavía afronta un gran desafío, tanto por los casos importados como por los pequeños rebrotes que hemos visto en los últimos meses. Tenemos que proteger a los trabajadores públicos, a quienes viajan al extranjero o al personal portuario, y asegurarnos de que no se infectan”, señaló.

China aspira a convertirse en el primer país del mundo en producir una vacuna a gran escala contra la COVID-19, para lo que cuenta con media docena de países en vías de desarrollo -entre ellos varios latinoamericanos- que participan en la fase final de ensayos clínicos de varios proyectos.

A finales de septiembre, Zheng anunció que China prevé fabricar 610 millones de dosis de la vacuna del coronavirus antes de que acabe este año y mil millones en 2021, pero no adelantó una fecha para que las vacunas puedan ser aplicadas masivamente.