A una semana de las explosiones en San Pablo Xochimehuacán, Puebla provocadas por una fuga de gas en una toma clandestina de hidrocarburo que cobraron la vida de 2 personas, el panorama en esta localidad aun es desolador sobre todo para 64 familias que lo perdieron todo.

“La fuga de gas, nos dio tiempo, por lo menos una hora a todos, por eso es que, no hay no hay personas muertas porque no dio como una hora más o menos salirnos a todos, como 1:30 más o menos, a la 1:30 y tronó como a las 2:40 más o menos”, dijo Aurelio Garcia.

“Mi dirección era calle industria número 3 si, y ahorita ya nada más quedó el nombre, ya no hay nada que hacer, pero no sacamos nada. Toda mi familia, toda mi vida, tenemos aquí 45 años de habitar la casa, todos mis hijos tenían ahí su casita cada quién”, reiteró Aurelio.

En la zona cero, no todos han podido regresar a sus casas para recuperar lo poco que les quedó.

“No hasta el momento no, hasta que saquen todo el escombro, esa es la idea que saquen todo el escombro porque como hay movimiento de las máquinas, entonces ahora sí que después van a revalorar para ver si ya puede ingresar la gente a sus domicilios. 40 años, toda la vida aquí sí, y si es triste, todo esto es triste a veces por personas, por una o dos o tres personas mire todo lo que se perdió, toda una vida” insistió el señor Garcia.

El fin de semana continuó la demolición de inmuebles y hasta el momento se han derribado 17 casas, de las 64 que resultaron severamente afectadas.

“Se han liberado 129 viviendas hasta ahora, se mantienen 12 personas con atención hospitalizadas y al corte de esta mañana teníamos 65 personas en el albergue”, detalló Ana Lucía Hill, secretaria de Gobernación.

A pesar de la tragedia durante el fin de semana, elementos de la Fiscalía de Puebla, aseguraron 8 pipas de gas Lp, en la colonia Ignacio Mariscal al interior de un predio con fachada de taller mecánico.

Las autoridades locales reconocieron que el robo de combustibles y otros delitos en Xochimehuacán, se volvieron una constante en los últimos años.

“De los que más incidencia tiene la junta auxiliar es el narcotráfico, narcomenudeo, robo de trenes, digo el robo de combustibles y obviamente el robo a transeúntes. No, no denunciaban ese era el problema, realmente el problema de San Pablo, en algunos casos, mucho miedo y en algunos casos complicidad”, concluyó César Juárez, presidente auxiliar de Xochimehuacán.

En el lugar continúan trabajando elementos del Ejército Mexicano, Guardia Nacional y seguridad pública.