El volcán YELLOWSTONE experimentó más de 1.000 sismos el mes pasado, un récord de cuatro años que, según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), «probablemente aumentará» en los próximos días.
El último informe del USGS confirma que se detectaron 1.008 terremotos en la región del Parque Nacional de Yellowstone en julio de 2021.
Sin embargo, el USGS señaló que se trata sólo de un análisis preliminar y que el número de temblores «probablemente aumentará».
Los geólogos esperan que se incluyan en el informe docenas de pequeños sismos , tras un periodo especialmente intenso de actividad sísmica registrado el 16 de julio.
El USGS dijo: «Esta es la mayor cantidad de terremotos en un mes desde junio de 2017, cuando se localizaron más de 1.100 terremotos».
Los terremotos de este tipo suelen estar asociados al movimiento de las fallas -zonas de fractura en una capa de roca- que pueden ser causadas por la subida de las aguas subterráneas.
El terremoto más fuerte registrado el mes pasado fue un evento menor de magnitud 3,6 a unas 11 millas bajo el lago Yellowstone.
Este periodo de mayor sismicidad también estuvo marcado por una serie de enjambres.
A partir del 16 de julio, por ejemplo, se detectó un enjambre de 764 temblores bajo el lago de Yellowstone.
El 19 de julio también se detectó un enjambre de 40 temblores a unas 12 millas al este-noreste de West Yellowstone, en Montana.
Los enjambres sísmicos representan aproximadamente el 50% de toda la sismicidad de la región de Yellowstone.
Sin embargo, la buena noticia es que nada de esto es una señal de una inminente erupción de Yellowstone.
Los sismos son provocados por el movimiento de las fallas y los procesos geotérmicos, más que por el movimiento del magma.
El USGS aseguró: «Aunque está por encima de la media, este nivel de sismicidad no tiene precedentes y no refleja la actividad magmática.
«Los terremotos en Yellowstone son causados predominantemente por el movimiento en fallas preexistentes y pueden ser estimulados por el aumento de la presión de los poros debido a la recarga de las aguas subterráneas por el deshielo.