Este fin de semana fueron reabiertos los paseos a bordo de trajineras en Xochimilco, aunque con baja afluencia, pero cumpliendo con las medidas sanitarias.
Hasta los remos desinfectan para garantizar la salud de los paseantes.
“La gente ha estado encerrada en sus casas, qué bueno que el gobierno haya ya permitido la apertura con toda la seguridad que tenemos, la gente ya puede venir aquí al embarcadero de Cuemanco a venirse a desestresar con todas las medidas la gente puede llegar. Ya es algo la verdad ya se ve movimiento, ya no se ve desierto el embarcadero, ya al menos pasa un poquito más de gente”, señaló el remero Wenceslao Castañeda.
Los encargados de estos paseos informaron que la industria turística es de las más golpeadas por la pandemia de COVID-19.
Aclararon que además de cumplir con las medidas sanitarias, que es trabajar al 30% de capacidad, siguen limitando el consumo de alcohol.
“En las trajineras están prohibidas las fiestotas, toda vez que, por ejemplo, desde acá ya limitamos las grabadoras, nada que los jóvenes venían y hacían su fiesta venían a pasársela muy bien que tampoco había problemas, pero ahorita por esta cuestión se han disminuido los jóvenes y nosotros ese servicio”, explicó Emilio Sánchez, secretario del embarcadero Cuemanco.
Este fin de semana fueron reabiertos los paseos a bordo de trajineras en Xochimilco, aunque con baja afluencia, pero cumpliendo con las medidas sanitarias.
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Hasta los remos desinfectan para garantizar la salud de los paseantes.
“La gente ha estado encerrada en sus casas, qué bueno que el gobierno haya ya permitido la apertura con toda la seguridad que tenemos, la gente ya puede venir aquí al embarcadero de Cuemanco a venirse a desestresar con todas las medidas la gente puede llegar. Ya es algo la verdad ya se ve movimiento, ya no se ve desierto el embarcadero, ya al menos pasa un poquito más de gente”, señaló el remero Wenceslao Castañeda.
Los encargados de estos paseos informaron que la industria turística es de las más golpeadas por la pandemia de COVID-19.
Aclararon que además de cumplir con las medidas sanitarias, que es trabajar al 30% de capacidad, siguen limitando el consumo de alcohol.
“En las trajineras están prohibidas las fiestotas, toda vez que, por ejemplo, desde acá ya limitamos las grabadoras, nada que los jóvenes venían y hacían su fiesta venían a pasársela muy bien que tampoco había problemas, pero ahorita por esta cuestión se han disminuido los jóvenes y nosotros ese servicio”, explicó Emilio Sánchez, secretario del embarcadero Cuemanco.